La cebolla es una de las primeras plantas condimentarías cultivadas, procede de Asia Occidental. Tiene tantos usos culinarios, que forma parte de muchas salsas, guisos, sofritos, etc.
Propiedades son tantas y tan variadas que podemos comentar algunas, es bastante nutritiva, contiene azúcares y vitaminas: calcio, potasio, hierro, etc. Todo ello le confiere propiedades digestivas, terapéuticas, antiséptico, estimulante y antiinflamatorias, etc.
El consumo regular beneficia el aparato digestivo y contrarresta a los accidentes cardiovasculares.
Existen muchas variedades con características muy diferentes. Su cultivo se adapta a todos los climas, es bastante resistente al frio y calor. Es fácil de cultivar.
La siembra suele efectuarse en semilleros al aire libre, cuando alcanza una altura de 15 o 20 cm. de altura se arrancan en sucesivos aclareos y se trasplantan agrupadas o situarlas bordeando los bancales ya que precisan poco espacio y no muchos nutrientes, así como mantener una humedad constante y debe estar expuesto al Sol.
Las cebollas para consumo fresco puede cosecharse a medida que se necesiten una vez que hayan alcanzado un tamaño aceptable.
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